Andrés Felipe Martínez, de Pasión de Gavilanes a conducir y repartir para mantener a sus hijos

El actor colombiano dejó la televisión para emigrar y ahora combina trabajos en logística con su pasión por la actuación, priorizando la estabilidad de sus hijos.
Pasión de Gavilanes se estrenó el 21 de octubre de 2003. ()
15 ago 2025 , 14:14
Kenneth Triviño

Andrés Felipe Martínez, recordado por su papel de Malcom Ríos en la icónica telenovela Pasión de Gavilanes, vive hoy una realidad muy distinta a la fama que le dio la televisión, lejos de las luces de la televisión y el brillo de la fama.

Tras un divorcio y la necesidad de garantizar la estabilidad económica de sus tres hijos —Pablo, Isabella y Gabriel—, el actor decidió emigrar a Estados Unidos, dejando atrás sets de grabación y cámaras, teniendo una vida que pocos, esperarían de quien fuera parte de una de las novelas más populares de América Latina.

Lea: Danna García, protagonista de Pasión de Gavilanes, fue hospitalizada por quebranto en su salud

En su llegada al país norteamericano, Martínez enfrentó jornadas extenuantes levantando cajas de hasta 45 kilos y realizando trabajos físicos en logística y transporte. “Aquí se vive para trabajar. Trabajas, duermes, trabajas, duermes... y sin familia, es muy duro. Hay mucha soledad”, confesó en una entrevista con Lo sé todo Colombia.

Lea: La peligrosa atracción entre Rosario y Juan David se robará la atención de los fans de Pasión de Gavilanes 2

Con el tiempo, encontró estabilidad laboral como conductor y repartidor, una rutina que le permite enviar dinero a sus hijos en Colombia:

“Recibir un cheque cada 15 días, eso no tiene precio. Gracias a eso puedo enviar dinero y darles de comer a mis hijos, y eso vale más que cualquier otra cosa”, aseguró.

Aunque su día a día se aleja del glamour televisivo, Martínez no ha abandonado su vocación artística. Participa en obras de teatro en Atlanta y colabora con una iglesia cristiana, manteniendo viva su pasión por la actuación mientras construye una nueva vida lejos de los reflectores.

Lea: Juan Alfonso Baptista, de futbolista a galán en Pasión de Gavilanes

El actor asegura que el reconocimiento público no afecta su orgullo.

“Estoy haciendo lo necesario para sacar adelante a mis hijos. Y eso es más valioso que cualquier fama o reconocimiento”, afirmó.

Hoy, Andrés Felipe Martínez combina la rutina laboral exigente con la actuación ocasional, demostrando que la determinación y el amor por la familia pueden redefinir el éxito más allá de la televisión.

TAG RELACIONADOS