Controversia en Tokio 2020 por la vestimenta de las deportistas

La gimnasta alemana Pauline Schaefer-Betz, durante su rutina de suelo en la calificación, en los Juegos Olímpicos de Tokio, el 25 de julio de 2021, en Tokio.()
Claudia Roura

Los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 tienen la mayor paridad de género en la historia. Pero lograr la eliminación de la sexualización del deporte será una lucha más larga.

Alba Torrens, estrella del baloncesto de España fue duramente criticada por usar pantalón el día la inauguración de los Juegos Olímpicos el pasado 23 de julio.

Las gimnastas alemanas decidieron usar trajes de cuerpo entero como parte de su lucha en contra “la sexualización en la gimnasia”.

En los Olímpicos se busca establecer el máximo nivel, el jefe de transmisión de Tokio 2020 trata de eliminar las imágenes hipersexualizadas de las deportistas.

Las gimnastas de Alemania enviaron un mensaje en contra de los uniformes que creen que explotan su sexualidad al competir en Tokio con uno que les cubre las piernas hasta el tobillo.

“Atractivo deportivo, no atractivo sexual” es uno de los mantras que defienden los responsables olímpicos en un esfuerzo por alcanzar la igualdad de género en el campo de juego y en la pantalla, reporta la agencia AFP.

Por otro lado, las jugadoras de balonmano playa de Noruega cambiaron los bikinis por shorts largos y cómodos pero la Federación las multó. Fueron tan grandes las críticas que la cantante Pink se ofreció a pagar los 1.500 euros de multa.

En cambio, Olivia Breen, atleta británica y campeona paralímpica de salto de longitud fue criticada por una funcionaria de la Federación Inglesa de Atletismo. Le dijo que su ropa era “inapropiada y demasiado corta”.

Breen escribió su vivencia en Twitter y dijo que lo que le dolía es que esas palabras vengan de otra mujer.

Las controversia se da sobre cuestiones técnicas de cada deporte y sobre todo la comodidad de las atletas al momento de competir, por fuera de ello no deben exisitir estándares de vestimenta.

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