21 feb 2014 , 03:56

Jóvenes ecuatorianos lideran grandes proyectos emprendedores

Pese a su corta edad, algunos incluso comercializan sus productos en el exterior.

Una lección de liderazgo es la que dan los jóvenes emprendedores ecuatorianos que desafían al mercado laboral con proyectos innovadores. Pese a su corta edad, algunos incluso comercializan sus productos en el exterior.

 

Llegaron hace cinco años a las aulas con un objetivo: tener su propia empresa, lo lograron y ahora son ellos quienes ofrecen fuentes de trabajo. Tienen entre 23 y 26 años y todo lo aprendido lo pusieron en práctica, como cuentan Dayana Vargas y Francisco Heredia, ambos socios de la empresa 'Computer Express', que ofrece cursos de informática.

 

“Cuando ingresamos a la carrera siempre vamos con esa visión, la visión de crear nuestro propio negocio para poder desarrollar un servicio o un producto que sea competitivo en el mercado y que a la vez sirva para los consumidores”, comenta Vargas.

 

Heredia añade que para ser emprendedor es importante además: “saber cómo calcular tus ingresos, cómo saber de verdad qué estás cobrando, cuáles son tus gatos... nosotros aprendimos lo necesario de todo”. 

 

En el norte de Guayaquil, otro emprendedor Daniel Sinegas expone su negocio que se relaciona a la producción y distribución de arena para gatos. Su producto está consolidado en las grandes cadenas de supermercados del país.

 

“Comencé vendiendo unas 30 fundas mensuales, ahorita ya puedo decir que estoy vendiendo unas 4.500 fundas al mes. Anualmente este último año hemos superado los 100.000 dólares en venta, estamos esperando el próximo año incursionar en el mercado colombiano”, señala Sinegas.

 

Ángel Castro, director de la Carrera de Emprendedores de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, explica que como parte de las clases los estudiantes desarrollan proyectos viables.

 

“Ellos en primer semestre desarrollan un plan de negocios muy básico que lo ponen en ejecución en segundo semestre, para que ellos puedan tener el capital necesario para comenzar el negocio, la universidad les ofrece un préstamo que ellos tienen que devolver al final del proyecto”, explica el director.

 

Gracias a su creatividad, algunos han elaborado diseños de bisutería o zapatos hechos con piel de pescado, otros están a punto de estrenar su franquicia alimentaria. 

 

La docente Inés Carrasco indica que hay estudiantes que ya comercializan sus productos en firmas internacionales: “Los chicos que están aquí del grupo elaboraron un 'splash' con colágeno que fue exportado a Chile, entonces es una de las metas de nosotros para que la carrera sea 100 por ciento práctica y el alumno sepa realmente cómo ser exitoso con su negocio”.

 

Las grandes ideas nacen en el edificio de emprendedores donde estos jóvenes estudian para refrescar el mercado con sus proyectos.

 

Noticias
Recomendadas