Burkina Faso registra un millón de desplazados

Más de un millón de personas se han visto forzadas a dejar sus hogares por la violencia en Burkina Faso, un dato jamás registrado y que supone un incremento del 100 % desde el comienzo del año, según informó este martes la Organización Internacional de Migraciones (OIM).

"Una de cada veinte personas ahora vive desplazada en Burkina Faso, esta cifra es alarmante", consideró el jefe de misión de la OIM en este país de África occidental, Abibatou Wane, quien explicó que la mayoría de los desplazados son mujeres y niños.

La mayor parte procede de la región del Sahel, la más afectada por la violencia yihadista, según las cifras facilitadas por el Consejo Nacional de Socorro y Rehabilitación de Emergencias (Conasur).

Sin embargo, desde principios de año personas en otras partes del país también se han visto obligadas a abandonar sus hogares.

"La situación y las necesidades de las comunidades desplazadas requiere un mayor compromiso de los diferentes socios para asistir a centenares de miles de personas que lo han perdido todo", afirmó Wane.

Este aumento del 100 % desde principios de año sucede cuando el país también se ve azotado por la pandemia de COVID-19, por lo que los pocos centros sanitarios que tienen que atender a los desplazados que llegan deshidratados y con graves problemas de salud también tienen que hacer frente a casos de enfermedades por coronavirus.

Los ataques se han seguido produciendo, incluso con mayor intensidad, a pesar de las llamadas al alto el fuego de organismos internacionales por la situación sanitaria de emergencia internacional.

Burkina Faso sufre ataques yihadistas desde abril de 2015, cuando miembros de un grupo afiliado a Al Qaeda secuestraron a un guardia de seguridad rumano en una mina de manganeso de Tambao, al norte del país, que aún sigue desaparecido.

Los atentados han ido aumentando y la situación se agravó en 2019, cuando que se multiplicó por diez el número de personas desplazadas por la violencia yihadista, según datos del Consejo Noruego para los Refugiados, un número que ha seguido creciendo desde entonces.

La región más afectada por la inseguridad es la del Sahel, situada en el norte y que comparte frontera con Mali y Níger, aunque la amenaza se ha ido expandiendo a provincias limítrofes y desde el verano de 2018 afecta también al este del país. EFE