02 abr 2014 , 11:32

Aeropuertos alemanes paralizados por huelga de pilotos

Los aeropuertos alemanes apenas están en funcionamiento. Los pasajeros han sido informados a tiempo.

La huelga de los pilotos de Lufthansa ha paralizado hoy los aeropuertos alemanes al obligar a cancelar unos 3.800 vuelos, sin que se hayan producido situaciones de caos pero sin que se perfile una solución inmediata.

 

La huelga, que ha sido convocada por el sindicato de pilotos Vereinigung Cockpit (VC) y se prolongará hasta la medianoche del viernes, afecta sobre todo a los aeropuertos de Fráncfort y Múnich, los mayores de Alemania, y a 425.000 pasajeros.

 

Los aeropuertos alemanes apenas están en funcionamiento, pero no se han producido situaciones de caos porque los pasajeros han sido informados a tiempo, a diferencia de la huelga del personal de seguridad del aeropuerto de Fráncfort a finales de febrero.

 

Lufthansa sólo puede garantizar 500 conexiones aéreas de largo y corto recorrido, y Germanwings también ha tenido que anular cientos de vuelos.

 

El Gobierno alemán ha instado a la empresa y a los pilotos a lograr una solución antes de 2015.

 

Lufthansa, que ofrece a sus pasajeros información sobre los vuelos y cancelaciones en su página web, cifra el daño económico que va a ocasionar la huelga -la mayor en la historia de la empresa- en una cifra alta de dos dígitos de millones de euros.

 

Tanto Lufthansa como el sindicato de pilotos Cockpit descartaron una solución rápida al conflicto en el primer día de huelga.

 

Una portavoz de Lufthansa destacó hoy de nuevo la disposición de la compañía a negociar: "Creemos que hemos presentado ofertas sobre las que se puede hablar".

 

Sin embargo, el portavoz del sindicato de los pilotos calificó la oferta de "engaño".

 

"Hacia afuera Lufthansa se muestra dispuesta a negociar, pero las ofertas son siempre las mismas. Para nosotros Lufthansa es el lobo con piel de cordero", dijo el representante de Cockpit.

 

Desde hoy y hasta el viernes se mantiene la conexión aérea de Múnich a Bilbao y el jueves a Ciudad de México.

 

Además, Lufthansa volará desde Fráncfort a Sao Paulo hasta el viernes y a Caracas el jueves, y también vuela a Miami y al aeropuerto JFK de Nueva York.

 

Secundan la huelga los pilotos de Lufthansa, Lufthansa Cargo y Germanwings, en total unos 5.400 capitanes y copilotos.

 

Germanwings también ha tenido que cancelar la mitad de sus 1.332 vuelos previstos, y el resto será operado por Eurowings.

 

No se ven afectadas por la huelga las compañías Swiss International Air Lines, Austrian Airlines, Brussels Airlines, Eurowings, Lufthansa CityLine y Air Dolomiti.

 

El sindicato de los pilotos de Lufthansa exige un aumento salarial del 10 %, mientras que la compañía ofrece un subida escalonada del 5,2 %.

 

Asimismo los pilotos de Lufthansa quieren volver a negociar las pensiones de jubilación y mantener su jubilación transitoria, pagos que permitían a los capitanes, hasta ahora, pasar a partir de los 55 años hasta 60 % de su sueldo base a la jubilación.

 

Un piloto de Lufthansa con una experiencia profesional de 20 años cobra 255.000 euros brutos anuales, incluidas extras, frente a los 150.000 euros de un colega de Swiss con la misma experiencia.

 

Un principiante -"First Officer"- tiene en Lufthansa un salario anual bruto de 73.000 euros, mientras que en Iberia se tiene que conformar con la mitad.

 

Pero hay pilotos en algunas compañías que ganan más que los de Lufthansa, como es el caso de la turca Turkish Airlines y de la china Cathay Pacific, donde ganan el doble debido al pago de menos impuestos.

 

La huelga de los pilotos de Lufthansa, por la que no tienen ningún tipo de comprensión la mayor parte de alemanes y que ha sido criticada en los medios de comunicación, ha generado un debate público sobre el uso abusivo de este tipo de acción de protesta.

 

La coalición de cristianodemócratas y socialdemócratas que gobierna actualmente en Alemania quiere regular por ley el derecho de huelga.

 

La canciller alemana, la cristianodemócrata Angela Merkel, y el vicecanciller y ministro de Economía, el socialdemócrata Sigmar Gabriel, acordaron al formar la coalición que sea válido el principio de "una empresa, un sindicato".

 

El sector del transporte aéreo alemán ha tenido que afrontar 51 huelgas desde 2008.

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