12 abr 2018 , 07:34

Familiares de ecuatorianos secuestrados llegan a Lima

Buscan participar de encuentro entre presidentes de Ecuador y Colombia.

Los familiares del equipo periodístico de El comercio, secuestrado el 16 de marzo en la frontera entre Ecuador y Colombia, llegaron a Perú la madrugada del jueves 12 de abril de 2018. Su propósito es exponer la situación del secuestro y las acciones que se han desarrollado tras el hecho, en la VIII Cumbre de las Américas que se desarrollará en la ciudad de Lima.

En un vuelo de Tame que salió la noche del miércoles: Ricardo Rivas, hermano del fotógrafo Paúl Rivas; Cristian Segarra, hijo del conductor Efraín Segarra; y Galo Ortega, padre del periodista Javier Ortega, partieron hacia la capital peruana. 

El hermano del fotoperiodista Paúl Rivas, Enrique, tiene la esperanza de reunirse con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.

Por su parte Cristian, hijo del conductor Efraín Segarra manifestó que los gobiernos de Colombia y Ecuador son los responsables de la vida de su padre y de sus compañeros.

Los presidentes Juan Manuel Santos y Lenín Moreno tienen previsto reunirse en el marco de la VII Cumbre de las Américas, para tratar el tema fronterizo, encuentro en el que los familiares quieren participar.

La última vez que se vio con vida a los compatriotas fue en una grabación filtrada a la prensa colombiana el 3 de abril. En ella aparecían los tres abrazados, con cadenas y candados al cuello, e instaban al gobierno de Ecuador a llegar a un acuerdo con los captores.

 

Navas solicitó a los medios ceñirse sólo a las fuentes de información oficiales para evitar "interferencias" en la labor de las autoridades.

 

El pasado 28 de marzo, la prensa colombiana informó de la liberación de los secuestrados, una información que resultó ser falsa y causó la indignación del gobierno ecuatoriano.

 

Ecuador señala a Walter Artízala, conocido como Guacho, de ataques contra la fuerza pública que desde enero han dejado cuatro militares muertos y 42 heridos entre uniformados y civiles.

 

Mientras, Colombia lo acusa de estar tras recientes atentados que han dejado sin servicio de energía a unos 200.000 pobladores en el municipio fronterizo de Tumaco

 

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