06 feb 2014 , 06:53

Familiares de colombiana desaparecida en Ecuador se manifiestan en Bogotá

Carolina Garzón Ardila desapareció en extrañas circunstancias en Quito hace dos años.

Familiares y compañeros de la estudiante colombiana Carolina Garzón Ardila, desaparecida en extrañas circunstancias en Quito hace dos años, se manifestaron hoy en una plazoleta de Bogotá para pedir a las autoridades que no se olviden del caso.

 

"Desde el primer momento que ella desapareció hemos luchado acá en Colombia, igual en Quito, y hasta el presente no tenemos ninguna respuesta, ninguna noticia con respecto a mi hija", aseguró a Efe Mery Ardila, madre de la estudiante, que en la época de la desaparición tenía 22 años.

 

La joven viajó a Ecuador como turista en 2012 y el 28 de abril de ese año desapareció de la habitación de una vivienda en que se hospedaba en el barrio Paluco de Quito, donde, según su madre, "dejó todo, su cámara, su dinero, su pasaporte, su cédula (de identidad)".

 

Por esa razón, sus familiares están convencidos de "que se la llevaron en contra de su voluntad".

 

Garzón estudiaba licenciatura básica con énfasis en educación artística en la Universidad Distrital Francisco José de Caldas de Bogotá y era una reconocida activista política en diferentes organizaciones juveniles y sociales.

 

La joven participaba en la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (Mane), era militante del Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y miembro de la Unidad Estudiantil (Unes), con la que estuvo en la marcha en contra de la reforma a la educación colombiana en octubre de 2011.

 

"Políticamente, moralmente, para nuestro partido es un compromiso trabajar con la familia, con los amigos, con los conocidos, en esta batalla que tenemos desde hace dos años, para que se esclarezca la desaparición", dijo a Efe Julio Rojas Álvarez, miembro del PST, quien formó parte del pequeño grupo de manifestantes.

 

Garzón compartía la vivienda con seis amigos, dos de ellas de nacionalidad argentina y los demás colombianos.

 

"Ellos dieron aviso a la familia dos días después de la desaparición, sin ningún detalle de lo acontecido, no sabían nada", comentó Mery Ardila.

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