Miles de personas protestan en el Líbano por la crisis de la basura

Miles de personas se concentraron en Beirut para protestar por la actual crisis de recogida de basura que viven algunas zonas del Líbano, en una manifestación en la que al menos siete personas fueron trasladadas a los hospitales con síntomas de asfixia provocada por gases lacrimógenos.

 

La Agencia Nacional libanesa de Noticias (ANN) informó de que los enfrentamientos entre los manifestantes y la policía continúan actualmente.

 

Según los principales canales de televisión, las fuerzas de seguridad utilizaron esos gases, además de cañones de agua y bombas de sonido para dispersar la protestas.

 

Varios policías y manifestantes resultaron heridos por los incidentes, que comenzaron una hora después del inicio de la concentración en los alrededores del Parlamento libanés, añadieron las televisiones.

 

Miles de personas se habían congregado de modo pacífico en el centro de Beirut donde los accesos al Parlamento y a la sede del Gobierno estaban cerrados por un cordón policial, según pudo constatar Efe.

 

Entre los manifestantes podían verse familias con niños y bebés, además de grupos que tocaban música con cubos de basura y coreaban eslóganes contra los dirigentes.

 

Otros asistentes izaban fotos de los ministros y diputados envueltos en sacos de basura con la inscripción "algunos desechos no son reciclables" .

 

Fara Warde, que acudió a la manifestación con su bebé de cuatro meses, dijo a Efe que los libaneses están "cansados de esta situación".

 

"Hay millones de problemas en el país sin que los dirigentes muevan un dedo para resolverlos; tienen que irse y dejar a otros que tomen el poder. ¿Que futuro tendrán nuestros hijos?", añadió Warde.

 

Yumana, acompañada de su hija de dos años, mostró la misma opinión: "Todas las instituciones están paralizadas, no hay seguridad, ni electricidad, ni agua y a esto se agrega el problema de la basura".

 

Por ello, la manifestante exigió la convocatoria de elecciones en las que deben elegirse "solo a jóvenes y gente nueva" y no "a los actuales dirigentes".

 

El pasado 19, otra manifestación similar dejó dos heridos entre los manifestantes y está prevista otra el próximo martes.

 

La organización Human Rights Watch (HRW) instó hoy a las autoridades libanesas a abrir una investigación sobre el "uso excesivo de la fuerza" la protesta de hace tres días y a asegurar que la Policía no utilice la violencia contra manifestantes pacíficos.

 

El conflicto social de los residuos comenzó tras el cierre del vertedero de Naame, el pasado 17 de julio, y el fin del contrato con la sociedad Sukleen encargada de recoger la basura.

 

Esto afecta sobre todo a las regiones de Beirut y Monte Líbano, en el centro del país, y hasta ahora el Gobierno ha fracasado en encontrar soluciones alternativas, debido a las divergencias entre las fuerzas políticas.