12 sep 2014 , 08:19

Suspenden audiencia a Galo Lara por indisposición del exdiputado

El presidente de la Corte de Justicia de Panamá indicó que dispondrá que médicos evalúan a Lara.

El exasambleista ecuatoriano Tito Galo Lara Yepes, detenido en Panamá desde junio pasado tras serle revocado su asilo en este país, no fue hoy a una audiencia oral ante el Supremo de Justicia sobre su proceso de extradición a Ecuador alegando estar indispuesto, por lo que la cita fue suspendida.

 

"Tito Gala Lara Yepes ha manifestado sentirse indispuesto de la audiencia para resolver este incidente de objeciones, interpuesto dentro del proceso de extradición seguido en su contra", indicó desde el estrado el magistrado presidente de la sala penal -y presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ)- Jose Ayú Prado.

 

La audiencia revisaría un incidente de objeciones en contra la resolución de la Cancillería panameña que estima procedente la petición de extradición a Ecuador de Galo Lara y una recusación contra los magistrados de la sala penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), presentados por la defensa del exasambleista.

 

Ni el defensor titular Javier Quintero ni el sustituto José Nelson Brandao asistieron a la audiencia, ya que, dijo Ayú Prado, "están incapacitados y han presentado su certificado (médico) de incapacidad los dos".

 

Por ello, Ayú Prado anunció la suspensión de la audiencia y la nueva fecha para realizarla, el 17 de septiembre próximo.

 

Aclaró también que se dispuso que los médicos del sistema penitenciario y del Instituto de Medicina Legal examinaran el estado de salud de Galo Lara "y así velar por su integridad física".

 

Por su parte, el exembajador de Panamá ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Guillermo Cochez, quien dijo a periodistas ser del equipo de defensa de Galo Lara, declaró que al exsambleista lo tienen detenido desde hace 3 meses en la cárcel La Joya "sin darle medicina".

 

Cochez aseguró que hoy se conoció que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA pidió información a Panamá sobre las condiciones de detención de Galo Lara, tras una petición de medidas cautelares para el exdiputado que fue presentada en agosto pasado ante el organismo interamericano por sus abogados.

 

"La Comisión, antes de dictar la medida cautelar que le diría al Gobierno de Panamá liberen a Galo Lara, ha pedido información sobre las condiciones de detención" del exasambleista ecuatoriano, afirmó Cochez.

 

El exembajador Cochez se reunió el 4 de septiembre pasado en Washington con la secretaria adjunta de la CIDH, Elizabeth Abi-Mershed, para exponer los argumentos de la petición que realizó el pasado 29 de agosto para solicitar protección por la supuesta persecución política que dice que sufre su cliente.

 

La justicia ecuatoriana condenó el pasado año a diez años de prisión al exlegislador Galo Lara, del opositor Partido Sociedad Patriótica (PSP), tras ser declarado cómplice de un triple crimen ocurrido en agosto de 2011, después de que había sido exculpado en 2012, cuando fue acusado de ser el "autor intelectual".

 

La abogada ecuatoriana de la familia de las víctimas de este homicidio múltiple, Tania Vásquez, en declaraciones a periodistas en la parte exterior de la sala de audiencias de la CSJ en Panamá, criticó la ausencia de Galo Lara y lo atribuyó a una estrategia del exdiputado.

 

"Él está enfermo pero resulta que no quiere hacerse atender por un médico, esa es la forma de burlar como siempre a la justicia, eso ya pasó también en el Ecuador" en las audiencias de juzgamiento en su contra, afirmó Vásquez.

 

La defensa de Galo Lara había pedido que en la audiencia de hoy comparecieran el expresidente panameño Ricardo Martinelli y otros funcionarios de su Administración, para explicar un supuesto pago de 6 millones de dólares por parte Ecuador para la extradición.

 

Galo Lara llegó a Panamá en septiembre de 2013 y un mes después el Gobierno del entonces presidente, Ricardo Martinelli, le concedió oficialmente el asilo territorial, pero en mayo pasado se lo retiró en una decisión inédita en la historia diplomática del país.

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