02 abr 2013 , 03:32

Ecuador recuerda el Día Mundial de Concienciación del Autismo

Hace un año y medio Camila fue diagnosticada con autismo y desde entonces asiste todas las semanas junto a su padre a terapias. Estas la ayudan a mejorar sus movimientos, a tener contacto visual y hasta hablar.  

Hace un año y medio Camila fue diagnosticada con autismo y desde entonces asiste todas las semanas junto a su padre a terapias. Estas la ayudan a mejorar sus movimientos, a tener contacto visual y hasta hablar.

 

Para Paola Zambrano, psicóloga de la Fundación Autismo Ecuador, los avances logrados por esta pequeña son asombrosos. Durante las terapias juega, arma rompecabezas y pinta, logrando así tener contacto con un mundo ajeno al suyo. 

 

“Camila llegó sin lenguaje, ahora ya tiene más palabras, todavía no llegamos a la elaboración de oraciones, pero ya está hablando palabras aisladas, tiene mucho más contexto visual”, comenta Zambrano.

 

El autismo es una discapacidad permanente del desarrollo que se manifiesta en los tres primeros años de vida del menor. Afecta la forma en que una persona interpreta todo su entorno, lo que ve, oye y toca, dificulta su comprensión, el uso del lenguaje, las relaciones sociales, la imaginación y el juego. 

 

Por cada 10 mil niños que vienen al mundo, 21 nacen con autismo. Por ello, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró por unanimidad el 2 de abril como el "Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo", con el fin de poner relieve a la necesidad de ayudar a mejorar las condiciones de vida de los niños y adultos que sufren este trastorno. 

 

Según la ONU, el autismo no está restringido a una sola región ni a un solo país; es un reto de alcance mundial que requiere medidas a nivel mundial. El día internacional del autismo tiene el objetivo de fomentar una sociedad más inclusiva, poner de relieve los talentos de las personas afectadas y velar por que haya oportunidades para que puedan desarrollar su potencial

 

Victoria Salcedo, madre de Camila, cuenta que desde que su pequeña nació, ella sintió que era diferente: “no señalaba, mil veces podía llamar a Camila y ella no sabía que era Camila, súper independiente, vívía en su mundo”. 

 

Hoy, Victoria quiere dar su mensaje al mundo: “Cualquier mínimo indicio lo más importante es buscar al especialista que le pueda o confirmar o descartar el diagnóstico, porque mientras más temprano se realiza el diagnóstico a los bebés, mucho más los podemos ayudar”.

Noticias
Recomendadas