Hospital Abel Gilbert Pontón aún con deficiencias

Pese a los grandes cambios e inversión en nueva infraestructura, el hospital más grande de Guayaquil presenta problemas de espacio y atención por falta de camas y médicos.

Nuestra reportera Merlyn Ochoa estuvo dos días en esta casa de salud y nos presenta un informe exclusivo, que usted podrá ver en breve en la sección multimedia, con historias de drama e incomodidad que deben vivir a diario los pacientes de esta casa de salud.

Postrada en una camilla y sin recibir atención encontramos a doña Goyita. Ella tiene problemas en los pulmones y llevaba doce horas en uno de los pasillos de emergencia del hospital. Pese a su gravedad no pudo ser hospitalizada por falta de camas.

La camilla es una tabla de plástico que aún muestra manchas de sangre de otro paciente.

Llegada la noche los hijos de Goyita recibieron las recetas pero se toparon con otra novedad, la falta de medicamentos.

Goyita tan grave como llegó se retiró a su casa, pues dudo ser internada por falta de espacio en este, el hospital más grande de la Costa ecuatoriana.

Recorriendo el Abel Gilbert encontramos a Clara. Lleva tres días con suero y duerme en una de las sillas de la sala de emergencias. Tampoco puede ser hospitalizada por falta de camas.

Tenemos que esperar que le den de alta a un paciente para obtener una cama, dijo una de las hijas de Clara.

Paciente en condiciones críticas deben regresar a sus casas porque el hospital colapsó debido a la gran demanda de atención. Diariamente se atiende a más de 2.300 personas y no todos pueden ser internados.

El año pasado en esta casa de salud se invirtió cerca de siete millones de dólares en remodelación de 25 consultorios, la sala de recuperación y dos quirófanos de emergencia, pero sobre todo en la contratación de nuevo personal.

Ninguna autoridad del hospital se pronunció al respecto.