Ahmadineyad nombra vicepresidente de Irán a ministro cesado por el Parlamento

El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha designado vicepresidente para Asuntos Sociales al ex ministro de Trabajo, Abdul Reza Sheijoleslami, censurado y cesado el pasado 3 de febrero por el Parlamento, que mantiene una dura pugna con el Gobierno, informó hoy la agencia local Mehr.

Ahmadineyad, según la fuente, firmó ayer la designación de Sheijoleslami, censurado como ministro por el Legislativo, con dos tercios de votos favorables de la Cámara, por haber nombrado el año pasado director de la Seguridad Social de Said Mortazavi, ex fiscal acusado de torturas a opositores con resultado de muerte.

El juicio político contra Sheijoleslami ha enconado la disputa dentro del régimen islámico entre Ahmadineyad y el presidente del Parlamento, Ali Lariyani, dirigente de la mayoría principalista y un candidato probable a la Jefatura del Estado en los comicios presidenciales de junio próximo.

En la sesión de censura de Sheijoleslami, Ahmadineyad estuvo presente para defender a su ministro y también a Mortazavi, y acusó a Lariyani y su familia de utilizar los cargos políticos que ostentan para su beneficio personal.

Sadeq Amoli y Mohamad Yavad, hermanos de Ali Lariyani, ocupan los cargos de jefe del Poder Judicial y secretario del Consejo de Derechos Humanos de Irán, lo que da un gran poder en la República Islámica a la familia, cercana al líder supremo, Ali Jamenei, con el que Ahmadineyad y su entorno también están enfrentados.

Mortazavi, que ya había sido destituido del puesto en la Seguridad Social, fue detenido el 5 de febrero durante 24 horas, lo que provocó también la indignada reacción de Ahmadineyad.

Posteriormente, en Qom, ciudad donde están los principales seminarios musulmanes chiís de Irán y de donde proceden los Lariyani, se produjo un incidente en el que un grupo de partidarios de Ahmadineyad intentaron atacar al presidente del Parlamento y se han producido varias detenciones según medios locales.

La lucha de poder entre el Parlamento, controlado por el sector principalista, el más ultraconservador del régimen islámico y cercano a Jamenei, y el entorno de Ahmadineyad, tachado de desviacionista y acusado de poner en duda la preeminencia religiosa en el sistema, se ha intensificado ante la cercanía de los comicios.

Las presidenciales están convocadas para el 14 de junio próximo y Ahmadineyad no puede presentarse al haber consumido los dos mandatos consecutivos que permite la Constitución, aunque también pretendería colocar como aspirante a uno de sus partidarios.

El líder supremo ha advertido a las diversas facciones del régimen que no deben airear sus disputas antes de los comicios, para tratar de evitar una situación como la creada por las denuncias de fraude hechas por la oposición reformista tras los de 2009, que según los datos oficiales ganó Ahmadineyad.

Decenas de personas resultaron muertas y miles fueron detenidas, entre ellas los líderes y candidatos reformistas Mir Husein Musavi y Mehdi Karrubi, en la represión de las protestas surgidas tras las denuncias de fraude en 2009.