Se compromete en reforzar la seguridad en las regiones en las que operan estos grupos armados.
El Gobierno mexicano insistió hoy en que los grupos de autodefensas que han surgido en algunos lugares del país "están al margen de la ley" y se comprometió a reforzar la seguridad en las regiones en las que operan estos civiles armados.
Este fenómeno se ha intensificado desde comienzos del año pasado en dos estados, Guerrero y principalmente Michoacán, donde tienen fuerte presencia grupos de narcotraficantes u otras bandas criminales, ante a la falta de protección de las autoridades a sus pobladores.
Sólo en Michoacán, una región que algunos analistas consideran cercana a un Estado fallido y que se disputan cárteles del narcotráfico rivales, hay grupos de autodefensas que funcionan en 14 de los 113 municipios. Vea además: Gobierno de México lucha contra la violencia y las autodefensas
"Por supuesto que están al margen de la ley", afirmó hoy en declaraciones radiales el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el ministro de mayor peso en el Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
Osorio Chong se refirió a la operación que uno de estos grupos realizó el pasado sábado en el municipio de Parácuaro, Michoacán, donde civiles armados ocuparon la localidad y le arrebataron el control a la policía municipal.
En los últimos meses se han registrado acciones parecidas en otras localidades de Michoacán. En algunos casos, los grupos de autodefensas han acusado a los policías municipales de estar al servicio de cárteles del narcotráfico.
"Esto no puede consentirse. No pueden retirar a los policías municipales. Si hay señalamientos, tienen que hacer una denuncia", afirmó el ministro en declaraciones a la emisora local Radio Fórmula.
Pero Osorio Chong también tendió la mano para resolver este problema pacíficamente, y citó contactos previos con responsables de estos grupos "para saber las causas" que motivan sus acciones e intentar poner remedio.
Ya en agosto pasado, el mismo Osorio anunció que las autoridades habían hablado con estos grupos para pedir que se desarmen, y se mostró dispuesto a continuar el diálogo.
Entonces sentó esa posición después de que 40 integrantes de una comunidad de Michoacán fueran detenidos por usar armas exclusivas del Ejército; reiteró lo mismo en días pasados y también hoy.
"Siempre nos ocupamos de esa posibilidad, para saber las causas que ellos manifiesten y los efectos", insistió.
Osorio recordó que el Ejército y la Policía Federal se han enfocado en los últimos meses en asegurar el territorio de Michoacán, sus vías y la seguridad de la población, labor que comparten con las autoridades del estado.
Pero también reconoció que, en conversaciones con el Gobierno de Michoacán, "se ve poca capacidad operativa en fuerza para poder enfrentar" los retos de seguridad. "En los próximos días habremos de darle todo el apoyo al Gobierno del estado", agregó.
Los contactos oficiales con los grupos de autodefensas son complejos para el Gobierno porque en algunos casos ha habido denuncias de que son armados por un cártel para atacar a una organización criminal rival.
Esas sospechas han surgido en Michoacán, donde hay una fuerte rivalidad entre el cártel de "Los Caballeros Templarios", surgido en ese estado en 2010, y el de "Jalisco Nueva Generación", que está presionando para controlar ese territorio.
Las declaraciones de Osorio Chong de hoy se conocieron con motivo del apoyo que el Gobierno está prestando a uno de los dirigentes de estos grupos de autodefensas, José Manuel Mireles, a raíz del accidente aéreo que sufrió el pasado sábado en Michoacán.
Policías federales vigilan el hospital de esta capital donde Mireles está siendo atendido. Osorio dijo el pasado martes que ese apoyo se debía a que Mireles "ha venido lastimando a los grupos de los cárteles, particularmente los Templarios".
Mireles es uno de los dirigentes de estos grupos de autodefensas con los que el Gobierno ha contactado porque no se tienen elementos que den pie a sospechas de posibles nexos con la delincuencia organizada, dijo hoy el secretario de Gobernación.
"Se le escuchó, se le dejó claro cuál era la única alternativa, y si no hay capacidad (...) para dotarles de seguridad, el Gobierno federal habrá de apoyar al Gobierno del estado", agregó el alto funcionario.
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