12 ene 2015 , 11:36

Comerciantes informales preocupados por regulaciones municipales

La política de control también incluye a los negocios de compra y venta de vehículos en vía pública.

Los vendedores de carros usados le piden al municipio de Guayaquil que extienda el plazo antes de sancionar a quienes dejen sus vehículos en la vía pública.

 

Las actividades en la calle Ayacucho, sector de intensa actividad automotriz en el centro de Guayaquil, se paralizaron momentáneamente tras las discusiones entre los delegados municipales y propietarios de autos que desconocían las políticas de control municipal, que apegado al artículo 425 del Código Orgánico de Organización Territorial (Cotaad), previo registro gráfico, sanciona con el pago de 180 dólares a los dueños de carros que contraten los servicios en lavadoras de automotores, mecánica en general o que vendan productos estacionados en la vía pública.

 

José Gómez considera que es una disposición injusta, pues nunca supo de estos controles.

 

"Yo no sabía nada sobre esta medida. Ellos tenían que avisar y mandar un comunicado antes", dijo Gómez.

 

Xavier Narváez, director de Justicia y Vigilancia del cabildo, explica los propósitos de la medida con la que hasta el momento se ha sancionado a 120 personas.

 

"El objetivo es que esta acción se erradique y se vaya desalentando, tanto en los propietarios de vehículos que requieren de estos servicios y en las personas que lo realizan en la vía pública. Lo que se quiere es que erradiquen esta práctica y consigan sitios, solares o espacios adecuados, donde puedan dar un mejor servicio y no afectar la vía pública", dice Narváez.

 

La política de control también incluye a los negocios de compra y venta de vehículos en la vía pública.

 

En el sector de la calle 6 de Marzo se agrupan el 40 por ciento de los 70  miembros que posee la Asociación de Comerciantes de Vehículos Usados de Guayaquil y que Jimmy Cortez preside. Él reconoce que deben regularizarse, pero explica que no será una tarea fácil.

 

"Para alquilar un local se necesitan dos o tres personas y por lo general, los vendedores informales no tienen los recursos para alquilar un local, al menos no uno solo, si se unen tres o cuatro personas puede funcionar, pero por el tema de la declaración, tampoco les va a convenir", afirma Cortez. 

 

En los próximos días esperan reunirse con los representantes municipales para llegar a entendimientos, esperando que baje la tensión de la polémica medida.

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