Reciben clases en malas condiciones en Esmeraldas

Cerca de 500 niños del recinto Zapallo, en Esmeraldas, reciben clases en construcciones improvisadas con caña guadúa y zinc, levantadas por los padres de familia.  

Se trata de la Escuela Batalla de Pichincha funciona bajo una construcción improvisada.

Hace cinco años, les ordenaron derrocar las instalaciones de la escuela de este sector, para construir una unidad educativa del milenio.

Las construcciones improvisadas son de caña guadua y zinc. Las bancas fueron colocadas el piso de tierra, las aulas de primaria y secundaria se dividen también con láminas de metal.  

Ante el reporte de la situación, el Ministerio de Educación admitió que no hubo respuesta oportuna para los niños de Zapallo y agregó que existe el presupuesto para la unidad educativa.

“La gente tiene su derecho a reclamar. Es una construcción de 3 y medio millones de dólares y eso significa una construcción que se demora entre 240 y 360 días de plazo”, indicó Mauricio Almeida, subsecretario de Administración Escolar.