CIDH investigará suicidio de joven que fue violada y quedó embarazada

Han pasado 17 años desde que la hija de Petita Albarracín tomó la terrible decisión de suicidarse. 

Ocurrió en el 2002 cuando la adolescente quedó embarazada del vicerrector del plantel público donde ella estudiaba. En ese entonces, ella tomó veneno y murió. 

En Ecuador, en el ámbito penal, el caso prescribió a los 8 años porque no pudo ser detenido el principal implicado por ello está archivado.

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El proceso llegó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que deberá dictar sentencia en este caso e iniciar un proceso en contra del Estado ecuatoriano que no protegió los derechos de la menor, quien estudiaba en una institución pública de Guayaquil. La resolución que imponga la CIDH es vinculante, de obligatorio cumplimiento.  

En un primer informe, la comisión CIDH determinó que el suicidio de la joven de 16 años estuvo muy relacionado al acoso y violencia sexual que ella estaba viviendo. 

Este caso también fue analizado en el ámbito civil y administrativo, pero como el principal acusado sigue prófugo las resoluciones en contra de él fueron mínimas. 

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En un comunicado, el ministerio de Educación indicó que: "esta cartera de Estado manifiesta su apertura para transparentar la información que se requiera en este proceso y acatar las resoluciones que se dicten desde la Corte Interamericana de Derechos Humanos”. 

Desde 2017 hasta la fecha, se registran 377 casos de violencia sexual que involucran a docentes.