17 may 2017 , 07:28

Maduro arremete contra la OEA mientras ola de violencia deja 42 muertos

Cuatro manifestantes murieron baleados entre lunes y martes en protestas contra Maduro.

Cuatro manifestantes murieron baleados entre lunes y martes en protestas contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, elevando a 42 los fallecidos durante seis semanas de manifestaciones, una espiral de violencia que será discutida el miércoles por el Consejo de Seguridad de la ONU.

 

Un joven de 17 años falleció la madrugada de este 16 de mayo de 2017 en un hospital tras haber recibido el lunes un disparo en la cabeza cuando un grupo armado atacó una protesta en el municipio de Pedraza (estado Barinas, oeste), informó la Fiscalía.

 

Otro manifestante, de 31 años, murió este martes de un disparo en el tórax durante disturbios en San Antonio de Los Altos, en la periferia de Caracas.

 

El lunes, según el Ministerio Público, otro hombre de 33 años falleció por impacto de bala en Capacho, por lo cual fue "detenido" un "policía regional", mientras que un joven de 18 años perdió la vida en Palmira, ambas localidades en Táchira (frontera con Colombia).

 

La oleada de manifestaciones iniciada el 1 de abril se perfila como la más trágica de los años recientes en Venezuela y está a punto de igualar la cifra de 43 fallecidos de las movilizaciones contra Maduro entre febrero y mayo de 2014.

 

Ello enciende alarmas en la comunidad internacional. El Consejo de Seguridad de la ONU discutirá sobre la situación en Venezuela este miércoles a petición de Estados Unidos, indicaron fuentes diplomáticas.

 

"No pueden seguir matando y torturando gente impunemente", afirmó, por su parte, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, refiriéndose a la Fuerza Armada, si bien gobierno y oposición se culpan mutuamente de las víctimas.

 

"Judíos del Siglo XXI"

Sin referirse directamente a la ONU, Maduro renovó la noche del martes acusaciones sobre un plan orquestado por Washington para intervenir a Venezuela, a la vez que denunció una "campaña de persecución".

 

"Somos los nuevos judíos del Siglo XXI (...). No llevamos la estrella de David amarilla, llevamos el corazón rojo de ganas de luchar y pelear por la dignidad humana y vamos a derrotar a los nazis del Siglo XXI", dijo.

 

El mandatario se refirió a protestas, llamadas "escraches", que en las últimas semanas apuntaron a funcionarios y exfuncionarios del chavismo, así como a sus familiares, que viven o trabajan en el exterior.

 

Cuando recrudece la tensión, el presidente renovó un decreto de estado excepción y de emergencia económica vigente desde enero de 2016, que restringe garantías constitucionales.

 

Hasta ahora, la ordenanza ha tenido primordialmente impacto económico, permitiéndole al gobierno manejar recursos sin fiscalización del Parlamento de mayoría opositora y aumentar su control sobre la producción y distribución de bienes básicos.

 

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