Guardacostas libios rescatan cerca de 500 migrantes hacinados en embarcación

Casi 500 migrantes, hacinados en una embarcación, fueron interceptados este miércoles por los guardacostas libios cerca de la ciudad de Sabratha (oeste) cuando zarpaban en dirección a Italia.

"Una oenegé (alemana), Sea Watch, intentó perturbar la operación de los guardacostas (...) en aguas libias, con la intención de recuperar a los migrantes bajo pretexto de que Libia no era seguro", indicó el portavoz de la marina libia Ayub Kacem.

Desde hace varias semanas, las oenegés que actúan en el Mediterráneo son criticadas en Italia por su supuesta "complicidad" con los traficantes de seres humanos que operan en Libia.

La operación del miércoles tuvo lugar a 19 millas marinas frente a Sabratha, precisó Kacem. Los traficantes dispararon contra los guardacostas pero no hubo víctimas, agregó.

En total se encontraban en la embarcación, que empezaba a hundirse, 493 migrantes, de los cuales 277 eran marroquíes y decenas de Bangladés, añadió.

Entre ellos también había 20 mujeres y un niño, así como migrantes oriundos de Túnez, Siria, Egipto, Sudán, Pakistán, Chad, Malí y Nigeria, prosiguió Kacem. 

"Su embarcación, un barco de madera de unos 18 metros de largo, llevaba un gran número de migrantes, mucho más que su capacidad", informó por su parte el coronel Abu Ajela.

"Podría haberse partido en dos en cualquier momento. (Los migrantes) estaban ante un peligro real", advirtió.

Estos migrantes fueron trasladados a la base naval de Trípoli, donde la Media Luna Roja libia y miembros de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) les proporcionaron asistencia humanitaria, antes de ser dirigidos hacia centros de retención en la capital. 

Según las organizaciones internacionales, entre 800.000 y un millón de personas, en su mayoría de África subsahariana, se encuentran actualmente en Libia con la idea de cruzar el Mediterráneo con embarcaciones poco seguras, que en su gran mayoría empiezan a hundirse cerca de Sabratha.