Reclusos piden mejor atención de salud en cárceles

Los reclusos de la cárcel de Guayaquil no siempre tienen acceso a servicios de salud pese a tratarse de un derecho garantizado.

Fabiola Triviño tiene a su hijo Jorge en el Centro de Privación de Libertad Zonal 8. En septiembre del año pasado Jorge tuvo un accidente dentro de la antigua penitenciaria, se fracturó su tobillo, fue operado y días después, trasladado al nuevo centro penitenciario.

Pero a pesar de que los médicos recomendaron una nueva intervención quirúrgica, por la gravedad de su lesión, ha pasado un año y aún no se concreta.

En estos documentos se observa que la Defensoría Pública y el Cuarto Tribunal de Garantías Penales ha pedido en reiteradas ocasiones a las autoridades del reclusorio agilitar la operación de Jorge.

Segun la Defensoría Publica no es el único caso,  pues aunque no cuentan con cifras estadísticas,  Jorge Rojas, defensor público regional. señala que hay otros privados de la libertad, en las mismas condiciones.

El informe del 2013 del Comité Permanente de Derechos Humanos recoge algunos de los reclamos sobre la dificultad que tienen algunos privados de la libertad para acceder a servicios de salud más especializados, en especial cuando requieren el traslado hacia un hospital.

La ministra de Justicia, Ledy Zúñiga, dice que por primera vez se brinda atención de salud en las cárceles, un logro que resalta pero que hay casos que están fuera de su competencia.

Zúñiga asegura que las competencias de salud se coordinan con el ministerio encargado de esta rama para de esta forma tener una adecuada atención para los privado de libertad.

Tanto la Constitución como el nuevo Código Integral Penal garantizan el derecho a la salud y la atención permanente a los privados de la libertad.