11 ene 2017 , 03:47

Proyecto de nuevo Código de la Salud causa polémica

Gremios y organizaciones piden archivo mientras en el Legislativo se inicia el análisis.


Representantes de gremios de abogados, profesionales de la salud y organizaciones sociales muestran su preocupación por la posible aprobación del nuevo Código de la Salud.

 

Ramiro García, presidente del Colegio de Abogados de Pichincha, expuso la principal preocupación sobre la norma:

 

“Y es que se abre la posibilidad del pago, por parte de los ciudadanos, por los servicios de salud. Esto implica, de tajo, eliminar la gratuidad de la salud en el Ecuador”, indica.

 

A esto se suma que, según ellos, la norma no incluye temas como la violencia de género como un problema de salud pública, no garantiza el acceso a medicinas y serviría para la persecución a los profesionales de la salud, denunció Alberto Narváez, de la plataforma por la salud y la vida.

 

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“Hay 59 artículos con sanciones y con suspensión de la licencia profesional que puede ir de un día hasta la suspensión definitiva por contravenciones”, señaló.

 

Según Virginia Gómez de la Torre, del Frente de Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos, la ley que impulsa el bloque oficialista en la Asamblea no recoge un conjunto de problemáticas sociales que son también de salud pública y por eso hacen su exigencia: “Que este Código debe ser archivado, este es un Código que no puede ser aprobado”.

 

En respuesta, la oficialista María José Carrión, integrante de la Comisión de Salud, explicó que la norma está pensada para garantizar el derecho a la salud y también para los trabajadores del sector. “Estoy proponiendo desde hace algún tiempo la carrera sanitaria como un hecho fundamental para los profesionales de la salud”, mencionó. 

 

Explicó que en el debate se llamará a todos los sectores para enriquecer el proyecto: “Creo que hay que más bien dar el tiempo necesario para que el debate sea serio, para que el debate no se politice y menos aún en estos meses”.

 

Los asambleístas de PAIS consideran que estas reacciones responden también a la campaña electoral, por lo que analizan postergar la aprobación del Código para después de las elecciones de febrero próximo.

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