17 ago 2013 , 01:24

La ciencia de Breaking Bad a prueba

La serie inspira incluso una exhibición en el Museo de la Imagen en Movimiento de Nueva York.

Ante la inminencia de sus capítulos finales, los fans de la serie Breaking Bad especulan sobre cómo será el desenlace de la historia del profesor devenido en productor de drogas y genio criminal. ¿Pero cuántas de las frecuentes escenas científicas reflejan la realidad?

"La química debe respetarse." Eso dice Walter White.

 

La serie inspira incluso una exhibición en el Museo de la Imagen en Movimiento de Nueva York.

Walt es un brillante investigador químico que debe dejar su trabajo y dedicarse a enseñar química en un instituto.

 

Después de descubrir que tiene cáncer terminal, vuelca sus conocimientos en la producción de metanfetamina en colaboración con su exalumno Jesse Pinkman.

 

Con su experiencia como profesor de química, hay escenas en las que Walt instruye a Jesse como si

estuvieran en el colegio. Jesse era un mal estudiante, pero al "cocinar" el cristal con Walt, comienza a comprender y a respetar la ciencia, tan esencial para conseguir un buen producto.

 

¿Pero son correctas las lecciones de Walt desde un punto de vista científico? Aquí analizamos algunos ejemplos.

 

El cristal puro es azul

En la serie, el cristal que Walt produce es inusualmente puro y además tiene un característico y delicado color azul.

 

Esto es útil desde el punto de vista narrativo, pero generalmente el color del cristal no indica la pureza o impureza de un compuesto químico.

 

Las impurezas en los minerales como el cristal de cuarzo pueden hacer que sea rosado (cuarzo rosa) o violeta (amatista) pero, en general, el color resulta de la forma en que los electrones absorben la luz en la sustancia y no es un indicador específico de pureza.

 

En una escena que sucede en el laboratorio móvil en el desierto de Arizona, dos mafiosos amenazan a Walt. Él improvisa un método para defenderse arrojando fósforo rojo en agua caliente.

 

Walt consigue escapar, encerrando a sus atacantes dentro la caravana. Después le explica a Jesse que esta reacción produce gas de fosfano venenoso.

 

El fósforo rojo puede reaccionar con hidrógeno para producir fosfano, pero no con agua caliente. El fósforo blanco reacciona con hidróxido de sodio (un químico que probablemente Walt tenía a mano) pero en la escena se puede ver que arroja un polvo rojo en lugar de una sustancia blanca.

 

Este truco no funcionaría en la vida real.

 

El gas sólo mata a uno de los mafiosos. Después de varias disquisiciones Walt se atreve a matar al otro, pero ahora tiene el problema de cómo deshacerse del cuerpo.

 

En una escena horripilante, Jesse vierte ácido fluorhídrico (HF) en la bañera para disolver el cadáver.

 

Este es un ácido útil para tener en cualquier laboratorio por sus inusuales características químicas. Como disuelve el vidrio, debe almacenarse en botellas de teflón (un plástico de alta resistencia química).

 

Es un ácido fuerte, pero es su composición química lo que hace que el HF disuelva el vidrio (y partes del cuerpo) pero no su gran "fuerza".

 

Desgraciadamente Jesse no hace caso a la advertencia de Walt sobre el uso de unos contenedores de un plástico específico (que debe ser a prueba de HF). Simplemente lo vierte en la bañera y los restos del cadáver a medio disolver atraviesan el suelo del baño y caen en el piso de abajo.

 

La batería improvisada

En otra escena en el desierto, Walt y Jesse "cocinan" cristal. Pero cuando necesitan volver a casa, notan que el vehículo se quedó sin batería. Walt fabrica una batería improvisada a partir de ácido, metales y cables y explica el fenómeno químico a Jesse.

 

Si pones dos metales diferentes en un ácido (o incluso líquido iónico como agua marina), la diferencia de reacción química de los metales produce voltaje. Es una célula electroquímica básica. Un grupo de estas células conectadas en un sistema de cableado son una batería.

 

Cualquiera que haya tenido una amalgama dental metálica de niño podrá recodar la extraña sensación producida al masticar accidentalmente un pedacito de envoltorio de aluminio: la saliva actúa como el líquido iónico, la amalgama y el aluminio son los dos metales diferentes y uno puede sentir la electricidad producida por esta batería "bucal".

 

La explicación de Walt es bastante acertada, pero una batería como la que muestra la serie sólo sería capaz de producir una pequeña cantidad de la energía necesaria para encender un motor.

 

Fulminato de mercurio

El gánster Tuco ha estafado y golpeado a Walt, quien lo confronta en su oficina y le ofrece más cristales e insiste en que le pague inmediatamente.

 

Tuco se empieza a poner violento, pero Walt tiene un plan: la bolsa de cristales que acaba de entregarle en realidad contiene "fulminato de mercurio". Walt lanza un cristal al suelo y lo hace detonar, provocando una explosión impresionante.

 

Walt logra salir victorioso de la escena con su bolsa de dinero. ¿Pero puede un pequeño cristal realmente causar tanto daño?

 

El fulminato de mercurio es un compuesto muy inestable y explosivo que sólo se puede controlar sin peligro en cristales muy pequeños, pero es algo que un profesor de instituto puede hacer.

 

Los cristales de un tamaño que superen unos pocos milímetros son muy difíciles de manipular. El juguete infantil que se lanza al suelo para crear un pequeño estallido contiene pequeñas cantidades de fulminato de plata.

 

Los cristales de Walt son más bien grandes y una bolsa repleta no sería lo suficientemente estable como para caminar con ella y moverla como se ve en el programa.

 

Sin embargo sí podrían, en teoría, causar una poderosa explosión. Pero la onda expansiva habría detonado también los otros cristales en la bolsa de Tuco. En el improbable caso de que los personajes hubieran sobrevivido, habrían quedado sordos por una buena temporada.

 

Reacción termita

Walt y Jesse queman la cerradura de seguridad para acceder a un depósito de químicos industriales.

Walt describe el proceso – una reacción termita o de mezcla reactante – a Jesse. Aquí se mezcla un óxido metálico (como el óxido de hierro) con un metal reactivo en polvo (como el aluminio) para producir hierro y óxido de aluminio.

La temperatura de la reacción es extremadamente alta y puede ser utilizada para soldar los vagones de un tren o incluso para quemar un candado.

 

La ciencia en este episodio es correcta y además la escena de Walt y Jesse tropezando al intentar cargar los barriles químicos es memorable.

 

Jonathan Hare es experto en física y química de la Universidad de Sussex, en Reino Unido, y presentador de televisión.

 

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