Un hombre que fue herido de bala durante un asalto, denuncia publicamente que no recibió atención inmediata en el Hospital Guayaquil, en el suburbio de la ciudad.
Carlos Olvera, ensangrentado, iba de un lado a otro con la bala en el hombro. Recibió un disparo luego de ser asaltado por tres jovenes en un bus urbano en el sur de la ciudad. Acudió a la maternidad de la zona donde recibió los primeros auxilios, minutos después se trasladó al Hospital Guayaquil y le dijeron que no lo podían atender.
En la Fiscalía puso la denuncia y le comunicaron que para recibirlo en el hospital no se necesita ningún documento.
Una vez más, regresó al hospital y ante la presencia de las cámaras lo atendieron. Hoy, Carlos, está en su casa recuperándose, todavía con la bala en el hombro.
Solo anhela recuperarse y que la falta de atención médica oportuna no le pase la factura a su salud.