Después de mucha expectiva en la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) y tras una larga reunión del Comité Ejecutivo presidido por Luis Chiriboga, el principal del fútbol nacional ratificó al estadio Olímpico Atahualpa y a la ciudad de Quito como la sede de las eliminatorias mundialistas de la Tricolor.
La polémica se originó tras una nueva ordenanza municipal que regula los espectáculos públicos y los aforos de los escenarios. De esta manera, todo sigue igual, Ecuador recibirá el próximo mes de septiembre a la selección boliviana en la capital de la República.
Chiriboga anunció que, dejando a un lado el interés económico y priorizando el deportivo, el Atahualpa seguirá siendo el fortín de la selección nacional donde ya consiguió dos clasificaciones a mundiales de fútbol.