Si te han dicho que no te hagas sonar los nudillos o el cuello y desde que eras pequeño no puedes parar de hacer crujir tus articulaciones y tu familia te advertía que estas se te iban a caer o te regañaban constantemente por el odioso ruido que generaba tu obsesión. Este video te explica lo que realmente le sucede a tus huesos.
En todas las articulaciones del cuerpo existe una zona llamada cápsula articular que protege las articulaciones, y en cuyo interior existe un lubricante natural llamado líquido sinovial, que favorece el movimiento de la articulación.
El líquido sinovial contiene aire. Al crujir lo nudillos, la articulación se separa, ampliando el espacio dentro de la cápsula articular, lo que provoca que los gases disueltos formen burbujas para ocupar el nuevo espacio creado. Al hacer fuerza, las burbujas escapan a gran velocidad provocando el sonido característico del crujido.
Mira el video con subtítulos AQUÍ