Hospital del IESS será abastecido con ayuda de pequeñas farmacias

El Hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Teodoro Maldonado Carbo, contratará a pequeñas farmacias para evitar el desabastecimiento de medicamentos oncológicos y de otros tipos. 

Esta es una de las alternativas que analizan las autoridades para solucionar el problema de los afiliados frente a la escasez de medicinas. Los directivos reconocen el ineficiente manejo de las bodegas de fármacos en esa casa de salud.

En el hospital Teodoro Maldonado Carbo funcionan 25 bodegas donde se almacenan medicamentos. En este lugar autoridades del Consejo Directivo encontraron fármacos que los administradores dejaron caducar a pesar de que los afiliados los necesitaban. 

El presidente del IESS, Hugo Villacrés, dice que ya hay sancionados. “Tenemos alrededor de 11 sumarios administrativos, tenemos gente sancionada, tanto pecuniariamente como llamados de atención por escrito en lo que va del período de intervención de este hospital”, acotó.

Villacrés también descubrió el robo de medicinas por parte de empleados de dicha casa de salud que destina el 80% de su presupuesto de 178 millones de dólares, a la compra de fármacos e insumos. 

Para evitar nuevas irregularidades, el titular del Consejo Directivo del IESS anuncia que se construirá una bodega que será controlada con ayuda de un sistema informático.

Lea también: Hospital del IESS Guayaquil, en emergencia por presunta red de corrupción

Villacrés explica cómo funcionará el servicio de farmacia mientras se implementa la bodega única. “Nuestro afiliado mediante un vale puede recibir aquellos medicamentos que, eventualmente por cualquier problema, registren stock crítico o stock cero dentro de las bodegas del IESS”, destacó. 

Mercedes Pilaloa es una afiliada afectada por la carencia de medicamentos oncológicos, ya que su esposo estuvo internado en ese hospital por su afección de cáncer al estómago. 

“Ya tiene quince días aquí hospitalizado en oncología y todos los medicamentos los he comprado yo. Se me han ido 250 dólares y ahora ya le dieron de alta y él no puede sentarse en una silla y llegar hasta Quevedo. Necesitamos una ambulancia y no nos han dado”, refirió Pilaloa.

Las autoridades esperan normalizar la situación de este hospital en febrero y para ello contrataran a pequeñas farmacias que abastezcan a los usuarios 

El pasado 21 de enero el Teodoro Maldonado Carbo fue declarado en emergencia por su grave situación sanitaria, en medio de denuncias de una crisis que atraviesan afiliados y médicos por la falta de fármacos e insumos.