España cooperará con Ecuador en ciberspionaje y en industria de defensa

España cooperará con Ecuador en la lucha contra el ciberespionaje y en el desarrollo de una industria propia de defensa, tras adjudicarse una licitación de radares contra el narcotráfico, según fuentes oficiales.

El ministro de Defensa español, Pedro Morenés, dijo en una entrevista con el diario El Telégrafo difundida el lunes, que su país "va a cooperar con el gobierno de Ecuador" para que satisfaga sus propias necesidades en la materia.

La asistencia se concretará a través de la compañía Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España (Iesdefe). "Es importante que Ecuador desarrolle una industria de defensa, y mejor si es de manera conjunta", dijo Morenés, quien visitó Quito la semana pasada. 

Los gobiernos no especificaron qué proyectos desarrollarán en el marco de esa cooperación. 

Simultáneamente, España va a "compartir experiencias y dar el conocimiento" que tiene sobre el combate del ciberespionaje, agregó el ministro.

Ecuador anunció en septiembre la creación, por ocho millones de dólares, de un centro de ciberdefensa para proteger sectores sensibles como telecomunicaciones y oleoductos ante un eventual ataque informático.

El sábado, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció que una empresa española obtuvo la licitación para comprar radares de vigilancia por 80 millones de dólares.

"Ganó una empresa española (...) eran radares que se necesitaban urgentemente para que no ingresen avionetas del narcotráfico", dijo Correa durante su programa semanal de radio y televisión.

Consultado por la AFP, el ministerio de Defensa declinó este lunes dar más detalles sobre la adquisición de los sistemas de detección.

El gobierno de Correa resolvió dotarse de radares a raíz de un ataque militar de Colombia, en 2008, contra un campamento clandestino de la guerrilla de las FARC en territorio ecuatoriano. 

La acción dejó 25 muertos, incluido un alto dirigente rebelde, y desató una severa crisis diplomática que fue resuelta en 2010. 

Correa lleva a cabo un proceso de modernización de equipos militares en el que tiene previsto invertir 1.558 millones de dólares hasta 2017.