09 oct 2014 , 05:05

Escuela del pasillo prepara a niños para preservar este género guayaquileño

Son unos 40 alumnos de diferentes edades que invierten su tiempo aprendiendo a tocar insttrumentos.

El pasillo ecuatoriano es un género que se mantiene inmortal gracias a sus profundas letras. Actualmente hay un grupo de jóvenes en Guayaquil que se esfuerzan para mantener vigentes nuestras tradiciones musicales. 

 

El museo Julio Jaramillo de Guayaquil guarda importantes recuerdos de la historia musical de nuestro país.

 

Un cuadro, un vinil o un instrumento antiguo son reliquias que nos hacen evocar grandes voces y personajes esenciales para nuestra cultura.

 

En la actualidad este museo alberga un gran tesoro, una habitación, que se llena de romance y tradición con aquellos jóvenes que mantienen viva nuestra música nacional.

 

Son aproximadamente 40 alumnos de diferentes edades que invierten su tiempo aprendiendo a tocar instrumentos como la guitarra o usan su privilegiada voz para entonar canciones como "Mi madre" del maestro Carlos Rubira Infante.

 

Maité Wacho tiene 9 años, y empezó a estudiar en la escuela de pasillo Nicasio Safadi desde los 8.

 

Un estribillo, una pasión, un recuerdo. Eso es el pasillo para el alumno de guitarra José Moreiro.

 

Cada uno de ellos ha sido escogido por su destreza y talento.

 

Escuchar a estas nuevas generaciones entonar un pasillo es un placer y una esperanza de que este género, considerado por muchos artistas como "El Alma del Ecuador" se mantendrá inmortal, contando sobre la historia y la esencia de nuestro pueblo.

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