23 abr 2018 , 10:41

Nueva diligencia por el asesinato de David Romo

El estudiante desapareció en mayo de 2013, pero en noviembre de 2017 se supo del crimen.

Una nueva diligencia se realiza en torno al caso de David Romo, estudiante universitario desaparecido hace casi cinco años en Quito. Alrededor de las 10H00 de este 23 de abril de 2018, se instaló la audiencia preparatoria de juicio contra 6 procesados por su presunta participación en el delito de asesinato del joven.

 

 

Romo tenía 21 años cuando fue visto por última vez, el 16 de mayo de 2013, mientras se embarcaba en un bus con dirección a su casa, ubicada en la Mitad del Mundo. Su desaparición es todo un misterio, no se han conocido las razones reales de este caso que conmociona a la capital.

 

El 27 de mayo de ese mismo año se conocieron las primeras pistas del caso. Cristhian D., de 32 años, controlador; Édgar M., de 19 años, cobrador y José C., de 45 años, conductor del bus donde fue visto el estudiante, fueron detenidos. El celular de Romo estaba en la vivienda de uno de ellos. 

 

Testimonios posteriores dieron cuenta de que el joven habría estado, en noviembre de 2013, en una clínica de rehabilitación clandestina, que funcionaba en una vivienda ubicada en la parte alta del barrio Pisulí al noroccidente de Quito.

 

En noviembre de 2017, el caso tuvo un nuevo giro, pues se conoció que David Romo había sido asesinado y sus restos incinerados, según un testigo que rindió su versión de forma anticipada. El 21 de noviembre de ese año se realizó una nueva audiencia en la Casa de Justicia de Carcelén. En esa diligencia y mediante videoconferencia, el testigo protegido dio su versión durante casi tres horas y dijo que el cuerpo del joven había sido descuartizado y luego incinerado para no dejar ningún tipo de evidencia.

 

En enero de 2018, la Fiscalía realizó una diligencia para recrear la línea de tiempo sobre lo que habría ocurrido, desde el tiempo del desplazamiento entre el sector de Rumicucho y la supuesta clínica, en el sector Pisulí.

 

Según la madre de Romo, Alexandra Córdova, fue la primera diligencia de este tipo que se realizó dentro de la investigación, después de casi 5 años de la desaparición del joven.

 

Córdova llevó la investigación sobre la desaparición de su hijo, en enero de 2018, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo que acogió su demanda y ofreció investigar lo sucedido en el caso. 

 

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