08 feb 2016 , 06:03

Mujer de 82 años encuentra a su madre biológica de 96

Ella tenía sólo 14 años cuando dio a luz a Eva May en un hospital de Nueva York.

Luego de 82 años en los que nunca dejó de preguntarse qué había sido de su hija luego de que le fuera arrebatada por las autoridades, Lena Pierce logró abrazar a su primogénita.

 

Ella tenía sólo 14 años cuando dio a luz a Eva May en un hospital de Nueva York. Seis meses más tarde el Estado se la quitó, alegando que su edad y condición socioeconómica no le permitirían criarla debidamente, según publica el portal de mystatesman.com

 

Eva May fue adoptada poco después y pasó a llamarse Betty Morrell, creciendo como hija única de una familia de Long Island, según informa la televisora local WBNG.

 

Cuando Betty tenía 21 años su padres adoptivos fallecieron, y ella comenzó una búsqueda de su madre biológica que se extendería por cinco décadas.

 

"Ya nunca más estaré sola", aseguró Morrel, actualmente radicada en Florida, luego de reunirse con su madre el pasado 15 de enero en el aeropuerto de Binghamton, Nueva York.

 

"No tengo hermanos ni hermanas pero tengo a mi madre. Es surrealista y maravilloso que estemos juntas de nuevo luego de tanto tiempo.

 

Pierce, que ya tiene bisnietos, dijo a la mencionada cadena que a menudo pensaba con preocupación acerca de la suerte corrida por la hija que le había sido arrebatada en 1933.

 

Desde aquellos tiempos, ella siempre residió en la región de Twin Tiers, se casó dos veces y tuvo siete hijos más.

 

"Ella está creciendo y yo me hago vieja", se lamentaba cuando recordaba a su hija pérdida. Actualmente, Lena Pierce vive en una residencia geriátrica en Hallstead, Pensilvania.

 

Mientras tanto, la búsqueda de Morrell tuvo un punto de inflexión hace algunos años, cuando a una tía "dejó escapar" delante de ella un par de datos: Que había nacido en Utica y que su nombre original era Eva.

 

Con esas nuevas y valiosas pistas la mujer renovó sus esfuerzos, pero todo seguía siendo muy difícil, ya que su caso de adopción había sido cerrado ya hacía muchos años. Sin embargo, tras comunicarse telefónicamente con los dos hospitales que hay en Utica pudo afinar su búsqueda, hasta dar con el primer documento: su certificado de nacimiento.

 

Desde el hospital le enviaron a su casa una copia, y con la ayuda de una nieta, descubrió una página llamada ancestry.com, donde dio con el nombre de Millie Hawk, una hija de Pierce ya fallecida. Gracias a la familia de Millie ella pudo dar con su madre.

 

"Cuando supe que estaba viva. . . cuando hablé por teléfono con ella. . .era como si todo lo demás se hubiera ido, y mi vida se completara en ese momento", cuenta la emocionada octogenaria.

 

Luego del encuentro, ambas pasaron todo el día juntas y en compañía de familiares y amigos. Y ambas aseguran que luego del milagro del reencuentro, continuarán su relación.

 

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